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Cementerios del mundo ¿los incluyes en tu visita turística?

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El turismo de cementerios, también denominado necroturismo, tiene como objetivo el descubrir su patrimonio artístico, arquitectónico, histórico y paisajístico, además de conocer leyendas de muertes. Es por eso que vamos a efectuar un recorrido por algunos de los cementerios del mundo y tú decidirás al final si lo quieres incluir o no en tu próxima visita turística.

Lo reconozco. Yo no me encuentro dentro de los habituales visitantes a este tipo de recintos. Aún cuando admito, y por supuesto respeto todas las opciones, hasta ahora he rehuido esta visión turística. Me podrían decir lo mismo de las iglesias, catedrales o cualquier otro recinto donde, por cierto, también se encuentran tumbas y lápidas de personas fallecidas. De hecho, hasta el Taj Mahal (de ello algo te cuento aquí) es un monumento funerario y reconocido como una de las 7 Maravillas del Mundo. Si lo hago, sin duda, será guardando el debido respeto.

Cementerio judío del Monte de los Olivos. Jerusalén
Fotografía de Maribel Gallego.

El hecho es que no es la primera vez que contamos curiosidades y anécdotas de cementerios en este espacio. Ya lo hicimos (pulsa aquí para encontrar la prueba) cuando descubríamos como se celebraba el Día de los Difuntos en algunos lugares del mundo. Ahora lo hacemos con un punto de vista diferente visitando algunos cementerios y lugares curiosos repartidos por el mundo, de la mano y gracias a mis compañeros del grupo de Facebook Marbelleros Viajeros: Agustín Casado, Pilar Domínguez, José Manuel Moreno, Maribel Gallego, Auxi Garrido, Carlos Díaz Ballesta y Natalia Morales. Ellos han cedido sus publicaciones y sus excelentes fotos en el grupo para que este artículo vea la luz ¡¡Gracias, compañeros!!

*Como siempre, te recuerdo, que si quieres ver las fotos en su formato original tan solo tienes que pulsar sobre ellas. ¡Ah!, y no olvides que todas tienen derecho de autor.


El cementerio de Arlington. Washington D.C.

Texto por José Manuel Beltrán. Fotografías publicadas en grupo público de Facebook, Marbelleros Viajeros y página oficial Cementerio Arlington.

Un poco más allá del centro de Washington, en la otra orilla del río Potomac, se encuentran enterrados miles de soldados estadounidenses. Estamos en el Cementerio de Arlington, una visita que se hace imprescindible si has llegado hasta la ciudad y que podrás reconocer enseguida por haber visto en el cine muchas escenas del mismo en tantas y tantas películas.

Es este camposanto uno de los más grandes del mundo. Un total de 250 hectáreas, y sus peculiares características, hacen conveniente la asistencia de un guía especializado al objeto de descubrir espacios, más allá de los emblemáticos, y conocer un poco más de su historia con más detalle.
También lo puedes hacer, prestándote una gran ayuda para localizar tumbas significativas, como la del Soldado Desconocido, descargándote en el móvil la app ANC Explorer,
Fotografía del grupo público Marbelleros viajeros, por Mariló Segovia.
La tumba del soldado del Ejército de los EE. UU. Thomas Smith, ganador de la Medalla de Honor, en el Cementerio Nacional de los Soldados y Aviadores de los Estados Unidos. Fotografía de Elizabeth Fraser / Arlington National Cemetery / released)

Aunque no es exclusivo, si es verdad que es predominante la catalogación de este espacio como cementerio militar. Antes lo indicaba. Aqui descansan los restos de más de 400.000 personas que participaron en todas las contiendas bélicas formadas desde la Segunda Guerra Mundial y en las que, de una forma u otra, se involucró Estados Unidos.

Además, también lo están, quienes siendo civiles prestaron valiosos servicios a la nación y entre ellos, sin duda no se podían olvidar, de los presidentes Howard Taft o el mítico John Fitzgerald Kennedy, al igual que sus hermanos Joseph, Robert y Edward.

Es muy aleccionador, y recomendado, un poco de su historia. Arlington Estate fue creado por el nieto adoptivo de George Washington, George Washington Parke Custis, para ser un monumento vivo y de homenaje al primer presidente. La hija de Custis, Mary, se casó con el primer teniente del ejército Robert E. Lee en 1831. Cuando murió, Custis dejó la herencia a su hija Mary Custis Lee durante toda su vida, y a su muerte, su hijo mayor heredaría la propiedad. Robert E. Lee se desempeñó como albacea del testamento de su suegro y nunca fue dueño de la propiedad.

El ejército se apoderó de Arlington Estate en la mañana del 24 de mayo de 1861 para defender Washington, D.C. Desde lo más alto de la propiedad, la artillería podría abarcar todos los edificios federales de la capital de la nación. La finca fue incautada no para castigar a la familia Custis-Lee, sino más bien por su valor estratégico. Durante la Guerra Civil se construyeron tres fuertes en la propiedad: Fort Cass/Rosslyn, Fort Whipple/Fort Myer y Fort McPherson. A partir de junio de 1863, se creó la gran Aldea de Freedman, establecida para esclavos liberados y escapados.
Soldado del 3.º Regimiento de Infantería de EE. UU. (La Vieja Guardia) colocando una bandera de EE. UU. Durante más de 55 años, los soldados de la Vieja Guardia han honrado a los héroes caídos colocando banderas de EE. UU. en las tumbas de los miembros del servicio enterrados tanto en el Cementerio Nacional de Arlington como en el Cementerio Nacional de los Soldados y Aviadores de EE. UU. justo antes del fin de semana del Día de los Caídos. En cuatro horas, más de 1000 soldados colocan 245 000 banderas frente a cada lápida, columbario y columna de pared de nicho. (Foto del ejército de EE. UU. por Elizabeth Fraser / Cementerio Nacional de Arlington)

El 13 de mayo de 1864, se llevó a cabo el primer entierro militar para el soldado William Christman. El ejército, que era responsable del entierro de los soldados, ordenó que Arlington Estate se utilizara para un cementerio. Es así como Arlington se convirtió oficialmente en un cementerio nacional el 15 de junio de 1864. Al igual que todos los cementerios nacionales de la época, permaneció segregado por raza y rango hasta 1948, cuando el presidente Harry S. Truman desagregó a los militares.

Inicialmente, ser enterrado en un cementerio nacional no se consideraba un honor, pero garantizaba que los miembros del servicio cuyas familias no podían permitirse llevarlos a casa para un funeral recibían un entierro adecuado. El primer "Día de la Decoración" oficial, más tarde rebautizado como Memorial Day, se celebró en el Cementerio Nacional de Arlington el 30 de mayo de 1868. Esta tradición continúa hoy en día, y es una de las razones por las que Arlington pasó de ser uno de los muchos cementerios nacionales a ser el principal cementerio militar nacional. El evento fue tan popular que en 1873 se construyó un anfiteatro para celebrar las ceremonias oficiales.
Fotografía, a primera hora de la mañana, de la Tumba del Soldado Desconocido. (U.S. Army photo by Elizabeth Fraser / Arlington National Cemetery / released)

La Tumba del Soldado Desconocido fue dedicada el 11 de noviembre de 1921, y es el monumento más emblemático del Cementerio Nacional de Arlington.

El sarcófago neoclásico de mármol blanco se encuentra en lo alto de una colina con vistas a Washington, D.C. Desde 1921, ha proporcionado un lugar de descanso final para uno de los miembros del servicio no identificados de la Primera Guerra Mundial de Estados Unidos, y se añadieron desconocidos de guerras posteriores en 1958 y 1984. La Tumba también ha servido como lugar de luto y lugar de reflexión sobre el servicio militar.


El cementerio judío del Monte de los Olivos. Jerusalén.

Fotos por ©Maribel Gallego Fernández y ©Carlos Díaz Ballesta

Si hay un testigo impasible de la historia de Jerusalén ese es sin duda el Monte de los Olivos, protagonista de varios pasajes de la Biblia, escenario de guerras con los árabes y el lugar sagrado de enterramiento para los judíos.
Fotografía ©Carlos Díaz Ballesta

El Cementerio judío del Monte de los Olivos​ es el más antiguo y más importante cementerio de Jerusalén. Los entierros en el Monte de los Olivos comenzaron hace unos 3.000 años en el período del Primer Templo, y continúan hasta nuestros días.
Fotografía ©Maribel Gallego Fernández
Fotografía ©Carlos Díaz Ballesta

El cementerio de la Abadía de Cong. Irlanda.

Fotografía de ©Auxi Garrido

El pueblo de Cong rodeado de los lagos Lough Corrib y Lough Mask, cerca de Galway a la que ya realizamos visita que puedes leer aquí, pese a su tamaño tiene bastantes atractivos destacando sobre todo el castillo de Asfhord, la abadía de. Cong y los bosques cercanos junto a los lagos.
Las ruinas de la abadía del siglo XII son otro de los lugares emblemáticos de Cong, con un bello claustro y un paseo por el cementerio donde encontramos la Cruz Celta de Cong (Cross of Cong ), o mejor dicho una réplica ya que la original está en Dublín. Fundada en el año 1128 por la familia Connor, la abadía agustina sobre un antiguo monasterio del bajo Medievo se observan trazos del paso del estilo románico al gótico. La Abadía de Cong fue fundada por los Agustinos.

El Cementerio alegre de Săpânța. Rumanía.

Texto y fotografías por ©Mariló Segovia

Săpânța es un pueblo de aproximadamente 3.500 habitantes, emplazado a orillas del río Tisa y dominado por los Cárpatos. Esta zona norte de Rumanía se caracteriza por el apego de las gentes a sus tierras y tradiciones. Los domingos (día que visitamos el cementerio) la gente viste el traje nacional tradicional para ir a misa y se olvida de las disputas y rencillas de la semana.

El cementerio de Săpânța se encuentra ubicado en el centro del pueblo, en la iglesia parroquial, y cuenta con 800 tumbas labradas en madera que son una verdadera obra de arte.
Las cruces están talladas en madera de roble, en relieve, y pintadas todas en el mismo tono de azul, llamado azul de Săpânța. Cada una de las cruces tiene tallado un epitafio escrito en forma de poema. Los versos son simples, espontáneos y escritos en el habla de la gente de Maramures, pero están cargados de emoción y de gracia.

Cada epitafio contiene lo que fue esencial en la vida del difunto que descansa bajo su cruz. Si ya en los cementerios se puede aprender de la vida de sus habitantes por sí, este de Săpânța es directamente un libro de antropología, pues muestra en sus sepulturas directamente las preocupaciones, sentimientos y pensamientos de los yacientes.

Como Săpânța es un pueblo pequeño, todos se conocen muy bien, de ahí el tono familiar que tienen la mayoría de relatos. buscaban con estos epitafios convertir el drama en esperanza, sobrepasando la muerte con humor, enfatizando los truinfos (y vicios) de la vida. Todas las cruces son de roble, con vivos colores, pintadas de azul para simbolizar el cielo al que van las almas de los fallecidos. El campesino rumano no tiene miedo de la muerte. Para él, la cruz representa una puerta de entrada hacia el reposo eterno.

En la cruz, sobre el epitafio, encontramos pintado en colores vivos una representación de la vida de la persona a la que hace homenaje. Así pues a los hombres los podemos encontrar a caballo, trabajando en un taller, cantando, yendo a la guerra, con el ganado. Las mujeres son representadas con los hijos en brazos, bailando con hombres, hilando, haciendo la comida…

El cementerio de Săpânța. es un cementerio único lleno de vida, color y flores. Y gente viva paseando entre sus tumbas. Ojalá haber sabido rumano y poder leer todos los epitafios. Os dejo con algunos de los que he encontrado la traducción.

El cementerio de Tower Hamlets. Londres.

Texto y fotos por ©José Manuel Moreno Fernández

Antes de la era victoriana , todos los muertos de Londres eran enterrados en pequeños cementerios urbanos, que estaban tan abarrotados y tan cerca de donde la gente vivía, trabajaba y adoraba que estaban causando enfermedades y contaminación de las aguas subterráneas.

Se aprobó una Ley del Parlamento que permitía a las sociedades anónimas comprar terrenos y establecer grandes cementerios fuera de los límites de la City de Londres. Había siete grandes cementerios (los "Siete Magníficos") construidos aproximadamente al mismo tiempo (1832-1841). El cementerio de Highgate es el más conocido; los otros son Nunhead , West Norwood , Kensal Green , Brompton , Abney Park.

Tower Hamlets London Borough Council asumió la propiedad del parque en 1986. Fue declarado Reserva Natural Local en mayo de 2000 junto con terrenos abiertos adyacentes en Cantrell Road y Ackroyd Drive. También ha sido designado como Sitio de Importancia Metropolitana para la Conservación de la Naturaleza y Área de Conservación. Los altos muros de ladrillo que lo rodean están en el registro nacional de edificios catalogados, al igual que siete monumentos individuales.

Friends of Tower Hamlets Cemetery Park es una organización benéfica independiente establecida en 1990 debido a la preocupación por la creciente negligencia de los propietarios sucesivos. El principal objetivo de la organización benéfica es fomentar un mayor uso de este espacio verde urbano interior como un santuario para las personas y un lugar de biodiversidad.

Este cementerio histórico de Londres ahora sirve como una Reserva y Parque Natural local que, además de incorporar lápidas y estatuas conmemorativas, se asemeja a un bosque natural, con muchas especies de aves e insectos que lo convierten en su hogar.

El cementerio de Tower Hamlets, en Londres, es una visita indispensable y alucinante........venir a verlo a la luz del día.

La Colina de las Cruces. Lituania.

Texto y fotos por ©Agustín Casado

Aunque lo parezca esto no es un cementerio pero sí uno de los lugares más desazonantes que yo haya encontrado en parte alguna. Es Kryziu Kalnas (Colina de las Cruces) cerca de Siauliai, Lituania. Es hoy un poco el símbolo de la resistencia a los soviéticos y de la independencia de Lituania.

Hasta hace unos setenta años era costumbre en ese pueblo ofrecer una cruz por una boda, un aprobado, la resolución favorable de una enfermedad y cosas así. Cuando los soviéticos ocupan el país, lo primero fue prohibir ésta como otras manifestaciones religiosas y pararreligiosas. Y quitaron las que había. Aquello tocó los huevos al personal que erre que erre siguió calzando cruces allí por el menor motivo e incluso sin otra razón que llevar la contraria al invasor. El asunto llegó a enconarse de tal manera que los soviets establecieron un puesto armado de vigilancia para impedir la cosa.

Y lo aparentemente milagroso, lo inexplicable, es que cruces que arrancaban por la noche, doble de ellas que reaparecían, no se sabe cómo, al día siguiente. Hoy, sin trabas de ese tipo, la gente clava sus cruces allí cada día por el asunto más nimio o sólo por seguir la tradición. Yo también puse mi pica en Flandes. Y el milagro en este caso es cómo pude, porque aparentemente no cabe ni una más.


El cementerio de Mirogoj en Zagreb. Croacia.

Texto y fotos por ©Pilar Domínguez

Me sorprendió el de Zagreb, en lo alto de una de sus colinas, un edificio impresionante cubierto de hiedra alberga esculturas curiosas y un jardín inmenso. Inaugurado en 1876, con el fin de aliviar la congestión de los cementerios de la ciudad, fue diseñado por el arquitecto austriaco Herman Bollé. No pertenece a ninguna iglesia o rito concreto sino a la ciudad. Es por ello que el terreno se encuentra dividido, a partes iguales, con espacio que da cabida a todas las religiones existentes y proporcionalmente al número de sus fieles.
Entrada principal al cementerio Mirogoj en Zagreb. Fotografía de ©pilar Domínguez

«La sección A era para católicos, la B para ortodoxos, la sección C para protestantes y la D para judíos. El Estatuto garantiza a cada una de las cuatro religiones legalmente reconocidas la lucha por la “realización plena y sin restricciones de los ritos religiosos durante los entierros en el cementerio”.

Se pueden encontrar diversos homenajes, como el Monumento a los soldados caídos en la primera Guerra Mundial; el Monumento al Héroe Nacional Yugoslavo y el Wall of Pain, Muro del dolor, en homenaje a las víctimas de la guerra de la Independencia.

El cementerio de La Atalaya. Luarca. Asturias. España.

Texto y fotos por ©José Manuel Moreno

El Cementerio de Luarca es, sin duda, uno de los más bonitos de Asturias. Situado en un promontorio que se adentra en el mar Cantábrico denominado "LA ATALAYA", donde también se ubica la CAPILLA DE LA VIRGEN BLANCA y EL FARO. También la famosa de mareantes y navegantes, sin duda, si visitas Luarca, esta zona no puedes perdértela. Las vistas desde allí arriba son espectaculares.

Este promontorio, que sirvió de baluarte defensivo de los ataques provenientes del mar, según don Jesús Evaristo Casariego, pudo haber sido construida por primera vez en el siglo XIII, aunque sufrió diversas remodelaciones en siglos posteriores, especialmente en el XVIII, promovida por el obispo Rafael Tomás Menéndez de Luarca.
En el cementerio de Luarca se encuentran los restos mortales de Severo Ochoa de Albornoz, premio Nobel de medicina, y de su mujer Carmen. Severo Ochoa murió el 1 de noviembre de 1993.
Desde cualquier punto del camposanto se puede apreciar el Cantábrico. Fotografía ©José Manuel Moreno

El cementerio judío de Praga. Chequia.

Texto y fotos por ©Natalia Morales

El antiguo cementerio judío de Praga es un sitio sobrecogedor por su tremenda historia durante muchísimos años. El único lugar donde enterraban a los judíos.

Se creó en 1439 (así data la primera lápida de Avigdor Karo) y, aunque fue creciendo a lo largo de los años, no se extendió todo lo debido y actualmente se puede apreciar todo su carácter intacto. Debido a la falta de espacio los cuerpos se enterraban unos encima de otros (llegando a más de 10 apilados). A día de hoy se pueden ver más de 12.000 lápidas.

Si quieres conocer algo más de la ciudad, la respuesta la tienes pulsando aquí.
Interior cementerio judío de Praga. Fotografía ©Natalia Morales

Y, como última etapa en este recorrido, nos quedamos en el Cementerio Inglés de Málaga. España.

Fotografias de ©Maribel Gallego Fernández

Cuando William Mark, que había sido testigo de estos entierros, fue nombrado cónsul británico en 1824 puso toda su dedicación en buscar un terreno que sirviese de cementerio para que los miembros de su comunidad pudieran recibir un enterramiento digno. Finalmente en 1829 las autoridades malagueñas le cedieron un terreno despoblado en las afueras de la ciudad cerca de la carretera de Almería y el cementerio inglés se hizo realidad, constituyéndose así como el Cementerio protestante más antiguo de la España peninsular.
Cementerio Inglés Protestante de Málaga. Fotografía ©Maribel Gallego

Según el registro de enterramientos la primera persona que fue inhumada en el nuevo cementerio fue un tal Mr George Stephens, propietario del bergantín “Cicero”, que se ahogó accidentalmente en el puerto de Málaga en Enero de 1831. Posteriormente ese mismo año se levantó un muro y la primera persona en ser enterrada intramuros fue Robert Boyd, fusilado en Málaga por su participación en la insurrección fracasada de los liberales en diciembre de 1831 junto con el general Torrijos. Por cierto ¿quieres conocer algo más de Málaga? Pues al terminar,pásate por esta guía que hicimos de la ciudad.

En esta necrópolis, hay enterrados muchos personajes que han contribuido a que la ciudad de Málaga se configure tal y como la conocemos hoy en día. No en vano, tres de los cinco lemas del escudo de la ciudad están relacionados con estos personajes. Ahí tenemos el hospital donado por las herederas de Joseph William Noble, a todos los marineros ahogados en el hundimiento de la fragata Gneisenau, en cuyo hundimiento los malagueños se ganaron el título de MUY HOSPITALARIOS o al ya nombrado Robert Boyd, que dio su vida junto a José María Torrijos consiguiendo que a Málaga se la conociera como LA PRIMERA EN EL PELIGRO DE LA LIBERTAD.

Personajes como los escritores Jorge Guillén, Gerald Brenan, el autor finlandés Aarne Haapakoski o Marjorie Grice-Hutchinson también encontraron su reposo final en este camposanto.

El Cementerio Inglés de Málaga fue nombrado Bien de Interés Cultural por la Junta de Andalucía en 2012 y está registrado en la asociación de cementerios significativos de Europa (ASCE) gracias a su gran valor artístico, histórico, literario y botánico.
Fuente de texto: Página oficial de Cementerio Inglés de Málaga (www.cementerioinlesmalaga.org)
Detalle de banco de forja en el Cementerio Inglés de Málaga. Fotografía de Maribel Gallego.

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COMENTARIOS

  • Rose Serrano escribió

    julio 23, 2022

    Me ha encantado tu post ciudadano! Cuantos lugares tengo ahora para visitar. Un abrazo!

    Responder
    • José Manuel Beltrán escribió

      julio 28, 2022

      Gracias, Rose. La verdad es que son muchísimos los lugares donde podemos sorprendernos. Y quien lo diría, también en lo relacionado a la muerte. Te agradezco el comentario.

      Responder

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