Texto por José Manuel Beltrán

Cada vez son más las ciudades que ofrecen al turista un producto, que quizás me atrevo a opinar, causa un determinado recelo bien sea por el precio o por el desconocimiento que de él se tiene. Me refiero a las tarjetas turísticas, o city cards.

La verdad es que ya son pocos los destinos, que de verdad se precien de motivar al turista, que no ofrezcan este interesante producto. Pero ¿qué son las city cards? ¿las conocemos? ¿sabemos aprovecharlas?

La city card es una tarjeta, eso parece estar claro, de tamaño similar a la de tu tarjeta de crédito aunque algunos destinos -bien porque las descargues por internet- son un simple documento/justificante. Generalmente de carácter nominativo -aunque no todas son así- te permite conocer la ciudad que visites, a fondo, de forma totalmente gratuita. ¡Bueno, gratuita no, pues has debido de pagar el coste de la misma!. Lo que quiero decir es que, con la tarjeta en tu poder, un buen número de lugares de interés turístico serán de acceso libre para ti.

La cosa no se queda ahí: monumentos, museos, atracciones, guías y mapas, transporte público, alquiler de bicicletas, descuentos en tiendas, cafeterías y restaurantes, y prioridad en el acceso (sin esperar cola para sacar tu ticket). Todos estas, y seguro que algunas más que me dejo en el tintero además de las que cada ciudad va incorporando, son ventajas y razones más que suficientes como para que te pienses -cuando visitas un destino, o quizás antes de hacerlo- si debes de adquirir la city card sobre todo en función de aquello que planeas realizar y de lo imprevisto.

¡Ah, claro, que tiene un precio! Por supuesto, y será más caro o más barato, no solo por la oferta de 1 día, 2/3 días, una semana, por la que la puedes adquirir sino, también, en función del número de personas que seáis viajando y de aquello que queráis visitar, sin olvidar el medio de transporte. Evidentemente, tendrás que echar tus propias cuentas pero luego no te quejes cuando -si no lo has hecho por mala previsión- recibas el extracto mensual de tu tarjeta -esta vez la de crédito, la de verdad-.

Por regla general la validez de la misma es por días consecutivos, contando desde la fecha y hora en que la actives (es decir, de cuando hagas tu primer uso). Es importante que, según la ciudad y tarjeta que quieras adquirir, leas detenidamente todo lo que en ella se incluye ¡quizás te sorprendas! y comiences a disfrutar de la ciudad con tu city card, de una forma más relajada.

Pincha en tu destino elegido, busca en internet su oficina de turismo y verás las ventajas que te ofrece su tarjeta turística. Yo, en una búsqueda aleatoria y por supuesto sin ningún interés comercial, te dejo aquí el enlace de We Love City donde tienes información de 40 destinos y tarjetas. Eso sí, está en inglés pero para algo está, si lo necesitas, el Google Traductor.
Y ¡recuerda! ----- Entradas gratis.
----- Beneficios adicionales.
----- Prioridad en acceso.
----- Transporte público gratuito
----- Guías y mapas gratuitos.
----- Elección de caducidad.
----- Etc......
Disfruta de tu destino con tu city card pero eso sí, con mucha SALUD, ciudadano viajero.